A nivel mundial, el concepto de “Ciudad Inteligente” o “Smart City” se escucha cada día más.  América Latina y Chile, no son la excepción. Pero, cómo un emprendedor puede aportar con soluciones innovadoras para una Smart City.

Una buena forma de dar comienzo a este artículo es aclarando qué es realmente una ciudad inteligente. ¿Será un lugar donde las personas poseen un IQ (coeficiente intelectual) elevado? ¿Es una ciudad llena de androides e inteligencia artificial? Pues ambos casos, se podrían considerar como una estrategia para lograr el objetivo principal de las ciudades inteligentes, el cual es finalmente mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.

Podemos tomar descripciones de varios autores, que nos aclaran un poco más lo que significa o la visión que se tiene de lo que es una ciudad inteligente o Smart City.

Por ejemplo, Theresa A. Pardo junto a Taewoo Nam en su investigación Conceptualizing Smart City with dimensions of technology, people, and institutions, las define de la siguiente manera “(son) una comunidad conectada que combina infraestructura de comunicaciones de banda ancha; una infraestructura informática flexible, orientada a servicios basada en estándares abiertos de la industria y, servicios innovadores para satisfacer las necesidades de los Gobiernos y de sus empleados, ciudadanos y empresas.”

O en la investigación Mapping Smart Cities in the EU, llevada a cabo y presentada por el parlamento europeo, la definen como “la Smart City está habilitada esencialmente por el uso de las tecnologías (especialmente las TIC) para mejorar la competitividad y asegurar un futuro más sostenible por la vinculación simbiótica de redes de personas, empresas, tecnologías, infraestructuras, consumo, energía y espacios.”

Aunque estas definiciones ya llevan varios años dando vueltas en la cabeza de quienes soñamos con que nuestras ciudades lleguen al punto de ser llamadas inteligentes, no dejan de perder validez, ya que su definición no ha cambiado, más bien, se ha adaptado al paso del tiempo. Luz María García, gerente del programa Sé Santiago Smart City de Fundación País Digital, explica que las ciudades, por medio de la aplicación de la tecnología en sus diferentes ámbitos, “deberán transformarse en localidades más eficientes en el uso de sus recursos, mejorar sus servicios entregados, promover un desarrollo sustentable y, en definitiva, mejorar la calidad de vida de sus habitantes”.

Para profundizar en su significado y lo que conlleva, se puede establecer que las Smart Cities son ciudades, valga la redundancia, que están compuestas por una red de Tecnologías de Información y Comunicación, a través de la cual se desarrollan soluciones que permiten implementar y promover prácticas de desarrollo sostenible, siempre enfocado en abordar los desafíos crecientes de la urbanización. 

En estas Smart Cities toda la información de la ciudad es obtenida a través de aplicaciones, sensores y dispositivos enlazados a Plataformas Cloud que centralizan la información. Estos datos son de acceso libre a través del uso de API REST, permitiendo que aplicaciones y dispositivos asociados a las IoT (Internet of Things) puedan recibir esta información, analizarla y administrarla en tiempo real, dando la posibilidad a municipalidades, empresas y la ciudadanía en general, tomar buenas decisiones que permitan mejorar su calidad de vida.

Retos de las ciudades, organizados según las 6 dimensiones de la Smart City (Fuente: eSmartCity)Entonces, cómo emprender soluciones enfocado en las Smart Cities. Para contestar a esto, es necesario y vital conocer los desafíos que tenemos presentes, ya que, como en todo caso de emprendimiento, nuestros proyectos deben estar enfocados en solucionar un problema o una necesidad real. Actualmente se ha logrado llegar al consenso de que los desafíos para las Smart City abarcan 6 dominios: Gobierno, Movilidad, Medio Ambiente, Economía, Calidad de vida, Sociedad o Personas.

Al mismo tiempo se debe entender que estas 6 áreas o dimensiones deben trabajar en conjunto, nunca verse por separado. Se puede entender que a nivel gobierno, teniendo información completa sobre lo que ocurre en cuanto a movilidad, medio ambiente y economía, podría impactar y mejorar la calidad de vida de la sociedad y las personas, a través de la gestión de los 6 dominios. Tomando en cuenta esto, es clave a la hora de emprender, tomar en consideración que mi solución debe contribuir a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía. Nunca está demás hacerse la pregunta ¿mi solución realmente mejora la calidad de vida de las personas?; si es así, ¿en qué aspecto lo hace?. 

Actualmente, incluso negocios que antes eran catalogados como MiPymes, pueden desarrollar o modificar su modelo de negocios para adaptarlo a las necesidades de una Smart City. Una panadería, por ejemplo, podría desarrollar una aplicación que permita avisar a la gente cercana cuando el pan está listo, así también permitir la compra o reserva de este a través de una aplicación e incluso haciendo el delivery de este. De esta forma, inmediatamente generas una mejora en la calidad de vida, tu cliente ya no debe ir a tu comercio sólo para darse cuenta que no tenías más pan. Tomándome de este ejemplo, se podría decir a ciencia cierta, que las aplicaciones de delivery que fueron y siguen siendo tan disruptivas, también aportaron a mejorar la calidad de vida de las personas. La gente ya no necesita hacer largas filas para almorzar, logrando una mejor optimización de nuestros tiempos. 

Hay que tomar en cuenta que el ser humano desde siempre ha tenido una exquisita valoración de su tiempo, y siempre busca aprovecharlo de la mejor forma, por lo que será muy valioso que tu solución permita ahorrar, aunque sea unos minutos, en la vida de una persona. Como dato, es bueno saber que Fundación País Digital realizó el 2014 un Ranking de Ciudades Inteligentes en Chile basado en estos 6 ejes: medio ambiente, movilidad, gobierno, economía, sociedad y calidad de vida. En ese momento se determinó que las 3 ciudades más inteligentes de Chile eran Santiago, Puerto Montt y Temuco. Aunque es un ranking antiguo, la tendencia actual no ha cambiado, y se sigue teniendo como referente a estas tres ciudades de nuestro país (a nivel latinoamericano, Medellín, Buenos Aires y Ciudad de México lideran el ranking Smart City Index 2020). 

Cada día existen más partidarios de las ciudades inteligentes, pero aún así existen muchos  detractores, que se basan en la idea de que el ser humano se está volviendo “flojo”, ya que cada día tiene más facilidades en todas las áreas y quehaceres de la vida. Así también, comienza a arraigarse la idea de que la mano de obra será reemplazada o automatizada por inteligencia artificial (RPA). Y pensándolo bien, tienen razón, pero no hay que dejar de lado la idea central de las ciudades inteligentes que es mejorar la calidad de vida de las personas, permitiéndoles tener más libertad de decidir sobre su día a día, teniendo antecedentes, información, estadísticas y datos en tiempo real para lo toma de deicisión.

Finalmente dependerá de cada persona qué decide hacer con su tiempo. Puede sentarse todo el día a ver televisión, dedicarlo a hacer deportes, pasar tiempo con su familia, aprender algo nuevo, etc. En resumen, las ciudades inteligentes son capaces de entregarnos más libertad a la hora de decidir, acompañado de una notable mejora en nuestra calidad de vida.

Finalmente, algunas empresas destacadas que son parte del ecosistema de desarrollo de soluciones tecnológicas para fomentar ciudades inteligentes en Chile son:

• Lybelux, pantallas que entregan información valiosa de su ciudad, en tiempo real
• InclusivApp, aplicación móvil para personas con discapacidad, donde puedes planear rutas de desplazamiento
• Aire, plataforma que permite visualizar datos sobre la calidad del aire a través de dispositivos que monitorean la ciudad en tiempo real
• Verde Click, aplicación de gestión de residuos y optimización para la administración municipal del aseo, ornato y cuidado de espacios públicos

SOBRE EL AUTOR
Carlos Caro es fundador de Lybelux, cuenta con +10 años de experiencia como programador, realizando proyectos de biometría, reconocimiento corporal, realidad virtual y aumentada, inteligencia artificial, advergames, aplicaciones, sistemas y plataformas, tanto para privados como para entidades públicas. Además, posee experiencia como emprendedor, mentor, evaluador y expositor en eventos de SUP Chile, Smart Araucanía, GeekCamp, The App Date, Virtual Chile, Imagine Business Lab, Ripley Labs, Incubatec, Patagonia LabSpace. Desde el 2021 es Consultor Asociado de GIA Consultores.